Las 10 reglas de oro para proteger y restaurar los bosques
Las 10 reglas de oro para la…
Las 10 reglas de oro para la restauración y protección de los bosques, según el Real Jardín Botánico de Kew y publicadas en Global Change Biology, son directrices para garantizar una restauración forestal eficaz y sostenible, capaz de promover la biodiversidad y hacer frente al cambio climático.
La Asociación Foreste per Semper ODV opera en regiones cruciales como Costa Rica, Amazonía y Madagascar, consideradas verdaderos puntos calientes de biodiversidad, siguiendo siempre los principios de restauración y protección de los bosques. Estas áreas albergan una increíble biodiversidad y juegan un papel fundamental en la lucha contra el cambio climático. Nuestro compromiso con la conservación, en línea con las 10 Reglas de Oro del Real Jardín Botánico de Kew , contribuye significativamente a la protección de estos ecosistemas vitales.
Esto es en qué consisten las 10 reglas:
1 – Proteger los bosques existentes
Mantener bosques intactos suele ser más eficaz que restaurar áreas degradadas. Proteger los bosques maduros es esencial para mantener la biodiversidad y los beneficios de los ecosistemas.
En lugar de plantar árboles indiscriminadamente, es importante permitir que se produzca la regeneración natural siempre que sea posible. Se deben respetar las especies locales y la dinámica natural.
Plantar una amplia gama de especies nativas es crucial para crear ecosistemas resilientes. Los bosques de monocultivo, si bien pueden capturar carbono, no tienen la misma riqueza ecológica ni la misma resiliencia al cambio climático.
4 – Incluir a la comunidad local
Involucrar a las comunidades locales en la restauración forestal garantiza una mayor sostenibilidad a largo plazo, ya que estas comunidades dependen directamente de los bosques para obtener recursos como madera, alimentos y medicinas.
La restauración forestal debería crear oportunidades de medios de vida, mejorar el bienestar humano y abordar cuestiones como la pobreza y la seguridad alimentaria.
La restauración forestal es un proceso que tarda décadas o incluso siglos en alcanzar el éxito total. Las iniciativas deben diseñarse para tener un impacto positivo a largo plazo.
Debido a que el clima cambia continuamente, es importante elegir especies y estrategias de restauración que puedan resistir las condiciones climáticas futuras.
Las actividades de recuperación no deberían empeorar la situación. Esto incluye evitar el uso de especies o técnicas invasoras que podrían dañar el suelo o los ecosistemas existentes.
Es importante medir el progreso y los impactos de las iniciativas de recuperación y adaptar estrategias basadas en estos datos. El seguimiento continuo es fundamental para corregir cualquier error.
Las comunidades indígenas y locales suelen poseer amplios conocimientos ecológicos y son los mejores custodios de los bosques. Reconocer y respetar sus derechos territoriales es fundamental para el éxito de los proyectos de restauración.
Estas reglas enfatizan un enfoque equilibrado que combina ciencia, conservación y dinámica social para garantizar la protección a largo plazo de los ecosistemas forestales.
¿Decálogo forestal del Apocalipsis ahora ?
por Luca Lombroso, ediciones Artestampa
La Declaración de Kew sobre Reforestación destaca la importancia de enfoques sostenibles y basados en la ciencia para la reforestación, con el objetivo de mejorar la biodiversidad, capturar el carbono atmosférico y garantizar medios de vida sostenibles para las comunidades locales. Estos son los puntos clave de la declaración:
Estos principios reflejan un enfoque equilibrado que apunta a maximizar los beneficios ecológicos, climáticos y sociales de la reforestación, integrando las necesidades de conservación de la naturaleza y las poblaciones locales.